El mundo se encerró por la pandemia y el sector de la cultura necesitaba más que nunca un motor que los impulsara. De la mano de BMW y junto con un equipo de valientes apostamos por seguir dibujando los trazos que marcan el rumbo del arte más vanguardista. Por eso y para la 35 edición de los Premios BMW de Pintura decidimos no pisar el freno y diseñar una escenografía que mostrara la luz de las personas. Un faro siempre brillante que nunca deja de marcar el camino.